Para 2025 se prevé el cierre de todas las centrales RDSI (Red Digital de Servicios Integrados) y llegará el apagón analógico para la telefonía convencional en las empresas. Este cambio conlleva muchísimas ventajas a nivel empresarial, ya que convierten las oficinas en espacios más inteligentes. Hoy en día muchas empresas tienen dudas, pero basta con comparar un conmutador físico VS con uno virtual para ver sus ventajas con respecto a los sistemas antiguos.
Desventajas de los conmutadores físicos tradicionales
Los conmutadores virtuales no tienen fecha para dejar de operar y tienen un largo futuro. Sin embargo, los conmutadores físicos tienen los días contados. Las características que diferencian a cada una de ellas son las siguientes:
1- Requiere una inversión inicial
La instalación de un conmutador virtual es muy sencilla y económica. Y esto supone una pequeña inversión inicial. Por el contrario la instalación de un conmutador físico conlleva una gran inversión y la instalación de hardware nuevo.
En cambio, un conmutador virtual no requiere hardware adicional, por lo que los costes de instalación son nulos en este aspecto. Estará ubicada en las instalaciones del proveedor de servicio, no en la empresa que le dará uso.
Además, los dispositivos se conectarán en remoto a este conmutador. Y solo será necesario invertir en los terminales deteriorados o que no sean compatibles.
2- Instalación
La instalación inicial de un conmutador físico es una tarea compleja, que deben llevar a cabo técnicos especializados. Tardarán días en su instalación y por tanto en poder empezar a trabajar con ellas. Todos los teléfonos deben conectarse mediante cables con el conmutador físico.
Además, un conmutador físico implica la instalación de teléfonos físicos. Se trata de un proceso largo y lento, que conlleva tener las comunicaciones en la empresa suspendidas durante varios días. Toda una serie de incomodidades a las que tendrá que hacer frente la empresa mientras sus trabajadores siguen trabajando.
Sin embargo, la instalación de un conmutador virtual solo requiere la configuración de un sistema software en la nube. Nada de instalaciones por doquier en la oficina, es un proceso sencillo. Esto implica que, solo con una mínima formación, un usuario con conocimientos medios de sistemas informáticos puede instalarlo, configurarlo, ponerlo en funcionamiento y realizar cambios siempre que sea necesario.
En cuanto a las aplicaciones de acceso al conmutador, tienen una configuración todavía más sencilla que puede realizar cualquiera. A pocos clicks ya estarán listas para hacer y recibir llamadas. Además, la ampliación de líneas es muy sencilla, basta con instalar la app en el terminal deseado y configurarla.
3- Mantenimiento
El mantenimiento de un conmutador físico es complicado. Generalmente se encargan de hacerlo técnicos especializados, y hay que pagar por este servicio. Por su parte, el mantenimiento de un conmutador virtual, al encontrarse en las instalaciones de la empresa que proporciona los servicios, no supone un desembolso de dinero para las empresas que lo utilizan.
Para dar de alta un conmutador virtual el usuario debe dar pocos pasos sencillos. Esto, facilita tener el sistema de comunicaciones a punto por un precio mucho más bajo que en el caso del conmutador tradicional. Caben destacar que las tareas para optimizar su funcionamiento son bastante intuitivas.
4- Funciones de cada conmutador
Una conmutador físico, además de permitir gestionar llamadas y redirigir las que una empresa recibe al empleado adecuado, tiene otras funciones. Por ejemplo, llamadas en espera o la posibilidad de contestar con una respuesta automatizada y ofrecer un menú de selección de opciones. También, en muchos casos, de un sistema de contestador automático para grabar los mensajes.
Pero además de las funciones mencionadas, el conmutador virtual puede añadir más. Por ejemplo, la creación de salas de videollamadas virtuales, un paso hacia el futuro de las videoconferencias.
También permite decidir qué llamadas respondes y cuáles envías a tu buzón de voz, es decir, al que corresponde a tu extensión. Y recibir faxes en forma de mensajes de correo electrónico directamente a tu email.
Por otro lado, el enrutado inteligente permite dirigir las llamadas a quien están destinadas mediante reglas predefinidas y personalizadas. Todo de manera que la optimización de las llamadas dispone de una mayor eficacia en su gestión, para que mejore la experiencia de quienes llaman.
Además, con sistemas de telefonía IP como el que ofrece Voiper puedes tener tu conmutador virtual y las comunicaciones telefónicas de tu empresa listas, sin importar desde dónde se hacen o reciben, ponerlas en marcha es un proceso muy rápido y sencillo. ¡Apuesta por un conmutador virtual para tu empresa!